He escuchado a personas que siguen hablando de su pasado como lo mejor que le ha pasado en la vida, siguen viviendo en su pasado, añorando esos momentos que nunca volverán, odiando a personas que ni ya existen porque esas personas cambiaron, maduraron y ya no son aquellos que conocieron, siguen estancados en una burbuja del espacio y del tiempo donde todo sigue igual. Si pasa eso contigo, mi consejo es “pincha esa burbuja”, que explote, que desaparezca, que perdones, que madures, que avances con la expectativa de que nada que haya pasado en el pasado es tan bueno como lo que te pasará hoy y en el futuro.

Si no avanzamos así, de pronto, cosa que tratamos de evitar en nuestros pensamientos, estaremos viejos, llenos de arrugas, un poco encorvados por el peso del cuerpo que ya no podemos llevar como antes, con menos pelo, algunas manchas, usando lentes o tratando de esforzar con el ceño fruncido nuestro enfoque para ver lo que antes veíamos sin esfuerzo alguno, y con dificultad para caminar y menos subir gradas, y eso, amigos y amigas, es la verdad, la horrible verdad, hasta que muramos, porque te vas a morir.
Pero si me voy a morir, quiero morirme habiendo vivido con expectativa, habiendo intentado cosas grandes, soñando con lo que nunca se había hecho, buscando hacer el bien a los demás, gozándome y a la vez resistiéndome a la mediocridad, y buscando dejar una buena herencia a mi familia y a todos los que me rodean. Si voy a morir, así quiero vivir. Pero no vale la pena saber que voy a morir y vivir atrapado por el pasado odiando, resintiendo, y completamente inmaduro, improductivo, amargado, herido, e inútil.
Sobre tu pasado, si no se puede arreglar, entiérralo, no lo resucites. Sobre tu pasado, si lo puedes arreglar, no dudes en hacerlo, te aseguro que hacerlo es como vivir al máximo, y te sentirás libre como ave que estuvo enjaulada por mucho tiempo. Sobre tu presente, trabaja, esfuérzate, planea, realiza, júntate con gente parecida, y aléjate de los que sangran sus críticas y penas por lo que les pasó. Sobre tu futuro, desde ya gózate, que vas para allá.
No podemos seguir desaprovechando el tiempo como si fuéramos inmunes a su avance. Solo tienes que ver una foto tuya de hoy, y otra de hace diez años. Y mientras más avanza la edad, más notoria será la diferencia entre una y otra. Y no hay nada, ni cirugía, ni ejercicio, ni fuente de la juventud que detenga el tiempo, nada lo hará. Aunque si recomiendo todo lo que puedas por mantenerte lo más fuerte y hermoso, pero por razones más elevadas que la vanidad.
Y no creas que el tiempo está a tu favor, está en contra, es como una corriente impetuosa de una río que corre hacia abajo y tu vas hacia arriba. Es tiempo de actuar. El tiempo avanza sin importar si tu avanzas. No lo ignores más. Al final del camino debemos terminar satisfechos, y eso empieza desde ya. Dios tiene un plan maravilloso para nuestra vida, y su deseo es que lo disfrutemos totalmente.